El juez inspecciona A Frouxeira para ver los daños de la laguna

Rocío Beceiro González. Lama y Asociados

12/01/12 La Voz de Galicia.

Morán Llordén encarga otros informes antes de resolver si sigue la causa

El magistrado del juzgado de instrucción número 3 de Ferrol, Alejandro Morán Llordén, se personó ayer en la laguna de A Frouxeira para realizar una inspección ocular del entorno y conocer por sí mismo la realidad de los supuestos daños causados en las viviendas próximas al humedal.

Morán decidió realizar esta prueba dentro de las diligencias que su juzgado incoó a raíz de que el pasado día 5 doce familias presentasen una denuncia conjunta en el juzgado de guardia de Ferrol por los desperfectos que ha provocado el desbordamiento continuado, tanto en sus viviendas como en el entorno.

«Consideramos que es posible que haya conductas delictivas al habernos inundado con premeditación y mantener esta alucinante situación prolongada en el tiempo sin que las medidas adoptadas hagan ninguna función», alegaba el portavoz de los vecinos, Fernando Vilar.

El juez acudió a la zona acompañado del secretario judicial, agentes del Seprona y la policía judicial de la Guardia Civil. Con la comisión judicial también asistieron la letrada y los portavoces del colectivo de afectados, y el alcalde de la localidad, José Antonio Vigo.

Los asistentes realizaron un recorrido por la zona de las viviendas afectadas e inspeccionaron la barrera que regula la entrada y salida del agua de la laguna además de redactar un acta de lo observado en el lugar.

Tras el recorrido por el paraje, el magistrado que instruye el caso resolvió encargar diversos informes antes de decidir si sigue la causa y señalar posibles culpables. Además, Morán ordenó a la Guardia Civil redactar un informe sobre la situación de los afectados.

Un mes inundados

Los vecinos más próximos a la laguna cumplen hoy un mes desde que se desbordó la laguna provocando la inundación del paseo marítimo, la pista municipal y los terrenos de cerca de una veintena de viviendas próximas al humedal.

En la zona continúan trabajando técnicos de Tragsa y cinco bombas de achique. Aunque se ha retirado gran parte del agua que inundaba los terrenos y la acera, la carretera que da acceso a la zona continúa intransitable.