Castrillón no vio anomalías en la adjudicación de obras

Alberto Pérez San Martín. Lama y Asociados

La Voz de Galicia.

El edil, que declaró sobre la Operación Torre, sostiene que no observó «doble facturación» en ninguno de los proyectos

El concejal de Obras en la anterior corporación municipal de Ferrol, Gerardo Castrillón, compareció ante la jueza que se ocupa actualmente de las diligencias de la Operación Torre, sobre supuestas contrataciones irregulares de obras municipales durante su mandato. Es el último imputado que quedaba por declarar y no lo había hecho antes por el grave accidente laboral que sufrió en su centro de trabajado, Intasa, que le ocasionó importantes quemaduras en las manos y en la cara. Estuvo alejado de la vida pública durante meses.

La Operación Torre, que conllevó un espectacular registro de oficinas municipales y del despacho de Castrillón, había sido ordenado por el juez Morán Llordén y generó una polémica entre el juez y la Fiscalía al entender esta parte que no era necesario. No obstante, la Audiencia dio la razón al instructor y no anuló la prueba, por lo que el procedimiento continuó con imputaciones a este edil, a Ángel Mato, a la sazón responsable de todo el área municipal en la que se englobaba Obras, un interventor y varios empresarios contratistas con el Concello como los titulares de Albanese y San Martín. Mato, que ya fue apartado de la causa y eximido de responsabilidad penal, decidió acompañar a Castrillón en los juzgados.

Castrillón, durante su comparecencia, declaró que no tuvo constancia de que «se hubiese vulnerado el pliego de condiciones técnicas en el contrato de mantenimiento de infraestructuras, adjudicado a Sanmartín, S. A.. «Ni el jefe de negociado ni la Intervención municipal rechazaron las certificaciones emitidas» en estas obras y añadió que desconocía que la contratista hubiese presentado partes por cuantías superiores al presupuesto. En concreto, sostiene el informe policial, se sobrepasaron los 65.477,06 euros en concepto de 17 certificaciones, cifra superior a la fijada.

Las certificaciones

En todo caso, Castrillón aclaró: «No intervengo en la elaboración de las certificaciones de obra ya que son competencia de la dirección facultativa de los contratos, limitándome a su aprobación tras su control técnico, administrativo y económico». Y en ello, en la responsabilidad de los técnicos y aparato económico y de Intervención del Concello insistió reiteradamente. Reiteró, sin embargo, que no apreció «irregularidades» en la actuación de los técnicos y funcionarios.

En cuanto a otros contratos de Parquets Albanese, S. L., desde el 2006 al 2011 y el supuesto trato de favor a esta empresa, aseguró que varias anotaciones aparecidas en las que se indicaba para Albanese, antes de la contratación, no eran de su puño y letra. «No tenía ninguna predilección hacia la empresa Albanese ni ninguna otra».